El COVID-19 y la calidad de la educación en Venezuela (Informe Analítico)

La realidad que se ha producido por la pandemia del COVIT-19, ha impactado las condiciones de vida y generado gran preocupación sobre las consecuencias que pueda tener en la garantía del derecho a la educación en la población venezolana, especialmente en niños y niñas. Aún más en el entendido que el derecho a la educación se concibe como derecho a una educación de calidad. De modo que, si la educación no es de calidad, no hay garantía del derecho a la educación. 

A partir de la evidencia encontrada en la prensa venezolana sobre los elementos que afectan la garantía de una educación de calidad en el contexto del COVID-19, se puede describir y analizar la realidad de la educación en Venezuela en el contexto de la pandemia tomando en cuenta cuatro aspectos: 1) Las condiciones de los niños y adolescentes (entorno educativo seguro, sano, integrado y dotado de recursos) para favorecer un excelente aprendizaje y niveles de rendimiento definidos. 2) La condición profesional, social y emocional de los docentes. 3) El uso de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación para el logro de los objetivos de EPT. 4) La supervisión del alcance de los objetivos educativos.

En este informe se analizan datos de informes sobre las condiciones de vida de los venezolanos, como CENDA y ENCOVI, relacionándolos con referencias de la prensa nacional, que evidencian la situación crítica de la población venezolana en términos de pobreza, nutrición, salud, seguridad ciudadana, servicios básicos, transporte y violencia que condicionan la garantía de la equidad y calidad en la educación. Haciendo visible que el compromiso de asegurar un entorno seguro, sano, integrado y dotado de recursos para favorecer el aprendizaje y desarrollo de niños, niñas y adolescentes se encuentra gravemente comprometido.

En el texto hay una sección dedicada a las condiciones sociales, profesionales y emocionales de los docentes, que recoge aspectos críticos de su realidad, como la salarial que implica que aquellos que desean mantenerse ejerciendo la profesión deben vivir con salarios que no permiten la subsistencia. Explica que debido a su salario quincenal, menor a USD $3, un docente necesita trabajar 4,5 años para adquirir una canasta básica alimentaria, constituyéndose en una de las razones por la que muchos docentes han migrado a otras actividades o profesiones para subsistir y como consecuencia, la calidad de la educación disminuye al no contar con suficientes docentes capacitados para el ejercicio educativo.

Con respecto al uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), el informe explica que, aunque es indispensable hacer uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) como vía de mediación de la educación, para permitir la relación estudiante-profesor manteniendo la distancia recomendada para la prevención del COVID-19, en Venezuela existen grandes limitaciones para ello. Entre ellas la falta de los equipos requeridos, las fallas en los servicios básicos, la baja velocidad de conexión y la mala calidad de la conexión. Igualmente, explica que además de resolver los limitantes tecnológicos para el uso de las TIC en el contexto educativo, se requiere la formación y manejo de estrategias didácticas y de evaluación propias de la educación a distancia.

En relación con la supervisión del alcance de los objetivos educativos, aunque el Estado venezolano es firmante de todos los acuerdos del Foro Mundial de la Educación, en Venezuela, al contrario de la tendencia internacional de recabar información para hacer seguimiento que permita evaluar el alcance de los objetivos educativos, es cada vez más difícil obtener información de los aspectos más básicos del sistema escolar. En medio de la falta de información confiable, el gobierno realiza presentaciones de sus logros y proyectos, en los que disfraza la realidad y realiza actividad promocional para asegurar la emisión de juicios favorables por parte de funcionarios que representan entes internacionales y que le ofrecen legitimidad.

Puedes leer este informe analítico del Observatorio Educativo de Venezuela en el siguiente enlace: El COVID-19 y la calidad de la educación en Venezuela